Prestaciones y mecánica
Modo piloto ON
La dirección tiene un tacto duro pero
un pelín desagradable. Para callejear se hace un poco pesada pero en
autopistas, nacionales y puertos de montaña es ideal. La única pega
es que no es igual de dura hacia ambos lados de giro. Es decir, en
una curva a derechas se nota mayor fuerza o resistencia desde dentro hacia fuera y en curvas a izquierdas pasa justamente al revés. Esto
hace que no sea del todo cómoda para enlazadas rápidas.
El cambio, para tener 370.000 es una
auténtica delicia. Entra perfectamente en cada una de sus cinco
velocidades. La primera y segunda velocidad si que rozan un poco pero incluso estas, se pueden meter utilizando únicamente dos dedos.
La marcha atrás es hacia abajo y a la
izquierda, lo que hace que en maniobras en ciudad no tengas que mover
prácticamente el pomo.
La unidad que hemos analizado viene con
unos Koni Sport regulables que instalaría su antiguo dueño.
Estéticamente no creo que haya bajado mucho pero se nota un toque
extra de dureza que aunque no encaje del todo con la filosofía del VW Golf 1.9 TDI 90cv Match, nos ha encantado.
En las enlazadas rápidas apenas se
nota el “efecto barco” y además transmite muy bien las
imperfecciones del asfalto.
El agarre lamentablemente no se puede
valorar objetivamente ya que monta unos Michelín Energy del 2007.
Si ya de por sí los Energy son auténticas piedras indeformables,
con cinco años no están para muchas fiestas. En seco cumplen
decentemente, en agua no es muy aconsejable forzar al alemán.
El motor de 1.9 litros y 90cv es
bastante ruidoso y las vibraciones se notan perfectamente en el
habitáculo. Vamos, que es imposible dudar si está arrancado o no.
En marchas cortas da sensación de
fuerza aunque luego realmente no tenga prácticamente patada. Entre
las 1800 y 2300 vueltas en donde aparentemente tiene el mayor par, de
ahí para arriba no hay nada, como en la mayoría de los diésel.
En la velocidad punta es donde mayor
factura han pasado los 370.000 y es que no pasa de los 150km/h de
marcador. No tarda mucho en llegar a esa velocidad pero de ahí para
arriba no hay nada, es como si estuviese limitado. Da igual que vayas solo o lo cargues con cuatro adultos, la velocidad máxima será siempre la misma.
Aunque marque 74.000km realmente tiene 374.000. El motivo lo desconozco |
El consumo es gratamente bajo. En
trayecto interurbano con cuatro personas promedia unos 5'5L/100km y
en autopista llega a bajar a los 5 litros incluso menos si vamos más
tranquilos.
Lamentablemente el Volkswagen Golf
MKIII 1.9 TDI 90cv Match se lleva un suspenso en el apartado de los frenos. No dispone
de ABS y la mitad del pedal no sirve para nada. Bloquea con bastante
facilidad y se fatigan terriblemente rápido. Para haceros una idea
en 5km de tramo ligero tuvimos que parar porque el pedal de freno
parecía un inflador de colchonetas.
Un cambio de latiguillos que
aparentemente están cuarteados, liquido de frenos en condiciones y
pastillas y discos nuevos, cambiaría su comportamiento radicalmente,
o eso suponemos por lo menos.
De todas formas no olvidemos que tiene
370.000km a sus espaldas y nos ha dado la impresión de que hay motor
para otros tantos siempre que se cuide en condiciones. Irrompible.
Espacioso, cómodo y agradable
En un primer momento el Volkswagen Golf
MKIII 1.9 TDI 90cv Match no transmite la sensación de ser muy espacioso pero en
cuanto te montas dentro se empiezan a ver espacios por todas partes.
En la parte trasera pueden ir dos adultos cómodamente sin que sus
piernas toquen los asientos delanteros.
En la parte delantera el conductor no
tiene pegas por falta de espacio o por tocar con las rodillas en la
parte baja del volante aunque te guste conducir de manera más
deportiva.
La pega es que los asientos parecen
sofás, no agarran muy bien ya que no tienen los labios exteriores y
en caso de ir ligero bailas un poco.
El maletero es espacioso y ancho sin
objetos o salientes que molesten a la hora de introducir equipaje.
Entran cuatro maletas tamaño persona “normal” sin problemas. El
conjunto de maletas de Guess de la parienta mejor que se quede en el
trastero.
La visibilidad es muy buena, no hay
puntos ciegos y los retrovisores tienen bastante amplitud. La pega
que se regulan manualmente y hay que cogerle el callo a la ruleta
para no ponerlo mirando al cielo.
En cuanto a compartimentos tiene dos
guanteras, una superior con llave y otra inferior algo más pequeña.
Bajo la consola central tiene otro hueco al que se le puede adaptar
un posavasos o similar ya que sobra hueco por todas partes.
En fin, el Volkswagen Golf MKIII 1.9 TDI 90cv Match está entre los coches que más nos ha sorprendido por su
fiabilidad, comportamiento y habitabilidad incluso después de 17
años.
Además actualmente se encuentra muy
barato en el mercado de compraventa. Esta unidad fue adquirida la
increible precio de 1400€.
Crash Test del VW Golf MKIII
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